Paris Hilton, nieta del fundador del imperio hotelero Hilton y rostro habitual de las revistas del corazón en EE.UU., marchará a Ruanda próximamente para "dejar huella en el mundo" y ayudar a la ONG 'Playing For Good'.
En declaraciones que publica esta semana la revista 'Newsweek', Hilton, de 26 años, reconoce, sin embargo, que tiene "miedo" porque ha oído que ese lugar es "peligroso".
"Nunca he hecho un viaje así", relata Hilton, que irá acompañada por las cámaras fotográficas y de televisión para que documenten su paso por dicho país africano.
"Quiero que quede constancia de todo", dijo Hilton, ya que, en su opinión, así se demostrará "lo duro que trabajo y cómo es el día a día para mí. Hay muchos malentendidos sobre mí".
Hilton explica además en la entrevista que ha llegado a la conclusión de que en Los Ángeles "hay mucha gente mala" y que antes de ir a la cárcel su vida consistía en "ir a fiestas y divertirme, era todo una fantasía".
Pero ahora, "cuando he tenido tiempo de reflexionar, me he sentido vacía por dentro. Quiero dejar una huella en el mundo", señala Hilton.
Hilton permaneció encarcelada 23 días por incumplir los términos de la libertad provisional que le había sido impuesta por conducir ebria, y salió de prisión el pasado 26 de mayo.
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