Britney Spears presenta un documental en el que se desnuda emocionalmente.

¿Valora el público el esfuerzo realizado por Britney Spears para normalizar su vida? ¿Es consciente de las frustraciones y limitaciones de una gran estrella como ella? ¿Creen que la vida de una supercantante es toda de color de rosa? Britney ha querido responder a estas preguntas desmontando mitos en un documental de 90 minutos que emitirá la MTV en el que se desnuda emocionalmente para dejar al descubierto a la verdadera Britney Spears.

"Tengo días realmente buenos, y luego tengo malos días", aclaró la joven cantante en la presentación del documental. Hizo referencia a su estado de ánimo después del infierno que pasó tras su duro divorcio de Kevin Federline. Fueron meses intensos en los que Britney tocó fondo con las drogas, las relaciones esporádicas y las salidas nocturnas que le llevaron a perder la custodia de sus hijos.

Pero la cantante logró reponerse y recuperar las riendas de su vida. Volvió a trabajar, sacó dos discos nuevos, hizo papeles en series de televisión y volvió a reconquistar su trono en el pop. Aún así, su vida está muy controlada por su padre, que maneja sus bienes, y por la justicia, que decide sobre su capacidad para ver a sus hijos. "Creo que he aprendido la lección y ya es suficiente", afirmó la artista, quien señaló que "incluso cuando se va a prisión uno sabe cuándo va a salir. Pero esta situación es interminable. Es como el Día de la Marmota" -película de Bill Murray en la que el personaje vive siempre en el mismo día-.

Britney aprovechó las promociones de su último trabajo, "Circus", para que un equipo de profesionales rodase su vida y poder así arrojar luz sobre su verdadera personalidad.

"Quise hacer esta película porque empecé a sentir que no estaba siendo vista con la luz que yo quería. Ésta es una oportunidad para dejar las cosas claras y hablar de lo que he estado pasando y hacia dónde voy", comentó.